Por Federico Rután
Más de 11 comunidades del distrito municipal de Las Galeras, en la provincia de Samaná, se oponen a la instalación de una planta eléctrica a carbón que una empresa piensa instalar con la aprobación de Medio Ambiente en Los Tacones de esa localidad.
Casimiro Balbuena, diácono de una parroquia de Las Galeras, denunció al comisionado de los Derechos Humanos, Manuel María Mercedes, en una reunión con miembros de iglesias, juntas de vecinos y dirigentes comunitarios, que la Empresa Generadora Eléctrica de Samaná (Luz y Fuerza) pretende utilizar combustibles fósiles dañinos, sin contemplar el daño que esto representaría para la agricultura y la salud de la zona.
Los denunciantes explicaron que la compañía Luz y Fuerza anunció en 2021 a los munícipes, una planta “100 % de energía limpia y renovable”, pero que comoquiera, sin consentimiento alguno, pretenden instalar una planta a carbón cuyas cenizas serían las mismas del rockash, que en el 2003 acabó con la vida de algunas personas en el distrito municipal de Arroyo Barril, tras ser traído desde Puerto Rico por la compañía AES, que fue demandada por los daños.
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Manuel María Mercedes dijo que no aceptarán que se repita lo ocurrido en el 2003, cuando niños y adultos fueron afectados con enfermedades y deformaciones por dicho químico; y aseguró que se mantendrán en vigilia para que la planta a carbón no sea instalada en la zona.
