Por Carlos Arturo Guisarre. (Ilustración por Dall-E 3). Como evidencia de la importancia que tienen las remesas familiares en la economía dominicana, estos envíos de mayo de 2024 de la diáspora representaron el 77.87% de lo que la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) recaudó en el quinto mes de este año.
De acuerdo con cifras del Banco Central de la República Dominicana (BCRD), el país recibió por concepto de remesas familiares US$887.1 millones en los 30 días del pasado mayo, utilizando un tasa RD$/US$ de 59.50% (para utilizar un promedio moderado), la nación recibió en remesas, en el quinto mes de 2024, el equivalente a RD$52,782.45 millones. Esa cifra se acerta a los RD$67,779.8 millones que la DGII recaudó en total, en los 30 días de mayo de 2024.
Tanto las remesas familiares como los tributos colectados por la DGII siguieron caminos muy diferentes. Mientras las recaudaciones de Impuestos Internos cayeron -1.2% en mayo de 2024 frente a mayo de 2023, las remesas se expandieron un 0.68% en el quinto mes de 2024, frente al quinto mes de 2023.
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Las remesas han tenido una expansión a la par con el crecimiento del producto interno bruto (PIB) dominicano. Entre enero-mayo 2023 y enero-mayo 2024, los giros de los criollos en el exterior a sus familias aumentaron un 5%.
En ese sentido, en los primeros cinco meses de 2024 República Dominicana captó US$4,382.3 millones en remesas familiares, frente a los US$4,173.5 millones que se acumularon entre enero y mayo de 2023.
Las remesas familiares son fundamentales para la economía de la República Dominicana porque constituyen una parte significativa del PIB del país. Aportan estabilidad económica al incrementar el ingreso nacional y mejorar las condiciones macroeconómicas.
En ese sentido, estas transferencias de dinero ayudan a muchas familias a cubrir necesidades básicas como alimentación, educación y salud, contribuyendo a la reducción de la pobreza y la mejora de la calidad de vida. Con el dinero recibido, las familias pueden invertir en la educación de sus hijos y en atención médica, lo cual tiene efectos positivos a largo plazo en el desarrollo humano.
Las remesas proporcionan una fuente constante de divisas extranjeras, lo que ayuda a mantener la estabilidad de la balanza de pagos y las reservas internacionales. También, al incrementar el poder adquisitivo de las familias, las remesas fomentan el consumo interno, lo cual es crucial para el crecimiento de la economía local y la generación de empleos.
En algunos casos, las remesas se utilizan para financiar proyectos comunitarios y de infraestructura, mejorando así el desarrollo de las regiones más necesitadas.
Por estas razones, las remesas son una fuente vital de ingreso para muchas familias dominicanas y juegan un papel crucial en el desarrollo económico y social del país.
